La filosofía básica de la Liga de la Leche puede resumirse en los conceptos siguientes:
El buen cuidado maternal mediante el amamantamiento es la forma más natural y efectiva de comprender y satisfacer las necesidades del niño.
Madre e hijo necesitan estar juntos inmediata, temprana y frecuentemente para establecer una relación satisfactoria y una producción adecuada de leche.
En sus primeros años, el niño tiene una necesidad intensa de estar con su madre que es básica, tanto como su necesidad de ser alimentado.
La leche humana es el alimento natural para los bebés, y el único que satisface sus necesidades cambiantes
Para un niño sano y nacido a término, la leche materna es el único alimento necesario hasta que muestra señales de que necesita alimentos sólidos, lo que ocurre aproximadamente a la mitad del primer año de vida.
Idealmente la relación de amamantar continuará hasta que el niño supere la necesidad de dicha relación.
La participación alerta y activa de la madre en el parto es un buen inicio para la lactancia materna.
Tanto la lactancia materna como la pareja madre-hijo/a se apoyan sobre el cuidado, la ayuda y el compañerismo del padre del bebé. La relación única que se establece entre el padre y el bebé constituye un elemento importante en el desarrollo del niño o de la niña desde la infancia temprana.
Una buena nutrición significa tener una dieta equilibrada y variada de alimentos lo más cercano posible a su estado natural.
Desde su infancia, los niños necesitan ser encauzados con amor, lo que se refleja aceptando sus capacidades y siendo sensibles a sus sentimientos.